Más fisioterapia para combatir las secuelas oncológicas
Sant Josep acoge una jornada en el marco del Día Mundial de la Fisioterapia. Los profesionales reclaman más plantilla para aumentar la calidad de vida de los pacientes
«Se necesita la intervención del fisioterapeuta para mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos, no es sólo la intervención quirúrgica o el tratamiento». Estas palabras, pronunciadas por la vicedecana del Colegio de Fisioterapeutas de Balears, Natalia Pérez, fueron una de las reivindicaciones que ayer quedaron sobre la mesa tras la celebración de las jornadas organizadas en el marco del Día Mundial de la Fisioterapia, que tuvieron lugar en el salón de actos de Sant Josep y en las que participaron una treintena de profesionales, además de pacientes.
Para Pérez, es necesario dar «más importancia y cabida» a las terapias en pacientes oncológicos, tal y como ya ocurre y se aplica en otros territorios nacionales y, en Balears, en el Hospital de Son Espases con el fin de evidenciar los beneficios que tiene implementar estas medidas.
De hecho, Sonia Gil, fisioterapeuta del Hospital Son Espases, fue una de las encargadas de presentar el programa de rehabilitación en el paciente oncológico, explicando las terapias aplicadas en un ejemplo médico.
La vocal de Ibiza del Colegio de Fisioterapeutas, Diana Sánchez, además, reclamó ampliar la plantilla de estos profesionales en el ámbito de la sanidad pública. Actualmente, en Eivissa hay nueve plazas en Atención Primaria y otras 11 en Especialización. De todos estos profesionales, solo 11 tienen su plaza adjudicada, mientras que el resto de plazas se van cubriendo con contratos.
Un solo profesional
Asimismo, Sánchez explicó que, a día de hoy, solo hay un fisioterapeuta en Can Misses que se dedica, única y exclusivamente, a tratar las secuelas del linfedema. «Solo se dedica a esto y no le da tiempo a hacer otro tipo de terapia», lamentó la representante de Ibiza.
Por otro lado, desde el Colegio de Fisioterapeutas consideran necesario dar un punto de vista «multidisciplinar» a la fisioterapia oncológica y a la implicación de los rehabilitadores: «Queremos incrementar el tipo de tratamiento que hacemos al paciente oncológico, no solo de las secuelas del linfedema, sino a través del ejercicio terapéutico y de otras actividades», señaló Sánchez.
Los pacientes que llegan a las manos de los fisioterapeutas, tras pasar por el servicio de rehabilitación, presentan secuelas músculo-esqueléticas o linfedemas.
El futuro de la unidad
Otra de las quejas que se pudieron escuchar ayer en la sala de plenos de Sant Josep fueron sobre el futuro de la unidad de Linfedema. En Can Misses, según Sánchez, existe este servicio que, a día de hoy, está en el aire ya que la sala que ocupa actualmente se destinará, a partir de noviembre, a otro tipo de terapia. «Ahora mismo no sabemos dónde va a ir esta sala de linfedema de la unidad de rehabilitación de Can Misses, pero de cara al futuro queremos un lugar grande, donde además de trabajar el linfedema, se pueda implantar otro tipo de programas y aumentar la plantilla de profesionales».
Desde el Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Balears advierten de la importancia de realizar ejercicio físico vigoroso, no moderado, ya que el sedentarismo aumenta las probabilidades de tener cáncer, una enfermedad que desarrollará un tercio de la población a lo largo de su vida. «Lo de ir de paseo a ver escaparates no vale. Hay que sudar la camiseta», explicó en la presentación el vocal del colegio de profesionales de Balears, Bartomeu Roig, quien destacó que el ejercicio acuático es muy efectivo en pacientes mastectomizadas.